El contraste del otro Pitic es sin duda captado por la sensible mirada de Rocio Solis quien nos presta sus ojos para que veamos otros ojos, cuyas miradas nos muestran que detras de cada imagen de pobreza se esconde algo mas.

Los niños triquis del poblado Miguel Alemán exhiben su gozo y la fotógrafa el diálogo fluido de quien atrapa la imagen y a la vez es atrapado.

En esta muestra fotográfica, la niña que acapara el lente con enormes y azorados ojos, apresa con la belleza de sus rasgos que ni la suciedad ni los cabellos tiesos logran opacar.

Las imágenes de “Los otros niños del Pitic” nos seduce con los destellos de determinación e instantes de alegría que encontramos en los rostros de los protagonistas, señales de que cuando ya no queda nada, sigue habiendo vislumbres de esperanza.